En este post os doy una serie de recomendaciones si tenéis en clase un alumno/a con discapacidad psíquica. Los alumnos con discapacidad intelectual límite pertenecen al grupo de alumnado con dificultades específicas de aprendizaje. Sin embargo, estas medidas que propongo les vendrán bien a ambos grupos.
En los centros ordinarios suelen haber casos de discapacidad ligera y media. Los alumnos con discapacidad intelectual grave se escolarizan en centros de educación especial.
– Planificar actividades de aula que tengan en cuenta la adquisición de los hábitos básicos: actitud postural, cuidado personal, pedir las cosas, aprender y respetar a los demás…
– Ofrecer modelos de lenguaje correctos.
– Hacer llegar la información a través de vías funcionales para el niño.
– Organización del aula en torno a las rutinas.
– Adecuación del currículo si fuera necesario. Esto siempre quedará reflejado en su Plan de Trabajo Individualizado.
– Metodología específica para el alumno.
– Material manipulativo.
– Apoyo visual.
– Potenciar la manipulación, experimentación situaciones de aprendizaje del aula para favorecer la asimilación de los aprendizajes y su generalización.
– Disminuir el nivel de abstracción.
– Presentar de diferente manera la actividad.
– Flexibilizar el tiempo.
– Favorecer su integración social en el aula.
– Reducir el grado de dificultad.
– Intentar repetir de vez en cuando, en voz alta, las instrucciones de la tarea.
– Programa de activación de la inteligencia. PAI. Se trata de trabajar las funciones ejecutivas en el aula. En realidad esto viene bien a todo el alumnado. Pero los alumnos con discapacidad necesitan trabajarlas mucho más.
– Modelado. Explicar la actividad primero delante de él, que vea cómo se realiza y que después la repita.